Mendiga voz
Poema
Tú eliges el lugar de la herida
en donde hablamos nuestro silencio.
Tú haces de mi vida
esta ceremonia demasiado pura
Revelaciones
En la noche a tu lado
las palabras son claves, son llaves.
El deseo de morir es rey.
Que tu cuerpo sea si
empreun amado espacio de revelaciones.
Silencios
La muerte siempre al lado,
Escucho su decir.
ólo me oigo.
in Los trabajos y las noches
Buenos Aires, 1965
Sem comentários:
Enviar um comentário